Los Études Tableaux, miniaturas-obra maestra de una extraordinaria belleza armónica, de forma, de escritura, de síntesis, de imágenes que son capaces de evocar y...de una extraordinaria dificultad musical y técnica. No quiero añadir nada más, la música es maravillosamente descriptiva y es justo que sea el oyente quien cree sus mundos y perciba los cuadros que cada pieza pinta.
A pesar de que el repertorio es conocido por los aficionados, este es un disco particular y, contrariamente al estándar, se lo cuento en primera persona.
Ni siquiera me atreví a tocar los Études cuando era pianista a tiempo completo, a pesar de que tenía en mis manos las principales obras de Rachmaninov, incluido su formidable tercer concierto. Pensé en estudiarlos y grabarlos cuando la vida se hizo mucho más compleja; ingeniero de día, pianista de noche. No quiero mentir diciendo que conciliar las dos cosas es fácil, no lo es. Tocar a nivel de grabado es ya de por sí un gran desafío, añadir un trabajo complejo todos los días, hace que todo sea excepcionalmente difícil. Estas líneas sirven de contexto al concepto fundamental que deseo transmitir a quien leerá estas palabras: es posible plantearse y alcanzar objetivos aparentemente imposibles en un contexto de vida ya más que plena. Y lo digo porque vale la pena, sea lo que sea. Los desafíos, vencidos o perdidos, nos regalan valiosísimas enseñanzas sobre nuestro yo, sobre nuestros límites que puntualmente se revelarán erróneos, y luego nos regalan una magnífica ola de conocimiento nuevo, de amplio espectro. Lo que se necesita es una buena dosis de voluntad inoxidable, una predisposición a resistir la fatiga, a veces el sufrimiento, y nunca dejarse distraer por el objetivo primario. Y otra cosa escribo, no contentarse nunca con aprender, estudiar, desafiarse, mejorarse. Porque la satisfacción es la muerte del deseo.
Ahora, pasando a las particularidades de este disco, comencemos con el hecho de que el piano utilizado para el grabado es mi personal: un maravilloso Bechstein D282 que yo llamo Albus. Un sueño de toda una vida, que duró más de veinte años, se hizo realidad. Albus me fue entregado directamente desde Berlín este abril (2023) y su inauguración fue precisamente el grabado de este disco. La preparación y afinación del piano para el grabado, la he curado personalmente.
Otro hecho peculiar es que yo grabé este disco. Con esto quiero decir que el trabajo de sound and balance engineer (colocación de los micrófonos, equilibrio, tratamiento acústico y grabación) lo hice yo mismo. Tenía en mente una toma que fuera lo más fiel posible al sonido del instrumento, extremadamente detallada y precisa, con especial atención dedicada a obtener una imagen sonora perfecta. La elección ha recaído inevitablemente en electrónicos de absoluta excelencia y la característica de una respuesta en frecuencia lineal y tonal neutra: micrófonos Sennheiser y Schoeps, omnidireccionales y sub-cardiodi para una gran presencia y limpieza cristalina, Preamplificadores Millennia y Rupert Neve que garantizaran la menor alteración posible de la señal nativa, cables de señal a la altura de los componentes mencionados.
También este es el fruto de años de estudio, de experiencia y de errores; un deber gracias va a las valiosas enseñanzas de mi productor Marco Lincetto, al que luego dejé las huellas acabadas. En las hábiles manos de Marco he confiado la delicada fase de mezcla y masterización, estrictamente en cadena analógica, como me gusta. El resultado es una grabación con un sonido natural y de gran impacto que, con una instalación bien construida, hace entrar el piano en la casa, en toda su gloria.
Con respecto a la elección de las piezas y su orden, hace mucho tiempo que intuitivamente había imaginado esta secuencia exacta. Es un recorrido de sonidos e imágenes que en mi cabeza se ha desarrollado precisamente así, que me encanta especialmente y por lo tanto, no necesitaría más ilustración. Sin embargo, añado que como persona que naturalmente percibe e imagina mundos abstractos, más allá de las imágenes que estos fragmentos-cuadro evocan, su secuencia, para explicarla con palabras comprensibles, me recuerda una hermosa iteración de funciones sinusoidales en tres dimensiones espaciales y una temporal, traducible en una sábana de espacio puro que se mueve sinuosamente, envolviéndote a veces, intercalando momentos de grandísimo ímpetu con otros de profunda reflexión, A veces asusta, pero en todo caso íntima. Frente al grabado integral, el haber extraído estas doce piezas en este orden exacto, no ha hecho más que confirmar esa intuición que tuvo hace mucho tiempo. Recomiendo una escucha de hilo para comprender mejor lo escrito arriba.
Rachmaninov y yo mismo.
Se podría dedicar todo el libreto solo a este tema. Simplemente, para concluir, su música es mi alma gemela en la música. He dedicado los últimos quince años a estudiar y tocar sus obras. Su lenguaje es tan parte de mí que he grabado un disco entero (Within & Without - Homage to Rakhmaninov) que recoge una serie de mis composiciones originales dedicadas al gran maestro. Con esto en cambio, quiero rendirle de nuevo homenaje tocando su música, para celebrar el 150º aniversario de su nacimiento.
total time: 42’00”
88kHz / 24bit original digital recording made at M° Edoardo Brotto’s studio, Italy, on the 1st and 20th of May 2023.
Analog mix & mastering made at Velut Luna Studio, Valencia, Spain, on the 26th of August 2023.
M° Edoardo Brotto plays his BECHSTEIN D282 CONCERT GRANDPIANO “ALBUS”, tuned and prepared by Edoardo Brotto.
M° Edoardo Brotto chose Sennheiser MKH 8020, Schoeps CMC6 Mk21, Millennia Media HV 3C and Rupert Neve 5211 Portico Designs mic preamplifiers.
The original master was monitored and personally approved by M° Edoardo Brotto.
